La predicción electoral es uno de los campos más difíciles dentro del mundo del estudio de la política. A todos los investigadores nos gustaría acertar de pleno, pero es una tarea realmente complicada.
CIS de Tezanos
Por esta razón, existen organismos e instituciones que vienen a hacer de forma más completa y profesional este tipo de datos, basándose en encuestas. Entre los distintos organismos que existen en España el Centro de Investigaciones Sociológicas, CIS, ha sido siempre uno de los más respetados por todos.
Sin embargo, parece que los nuevos métodos introducidos, en el diseño de las encuestas y su interpretación, por su actual director, José Félix Tezanos, no están alcanzando las cuotas de acierto que se esperan de una institución del prestigio y reconocimiento del CIS.
Andalucía como experimento fallido
El CIS de Tezanos se llevó su primer gran choque en la estimación de voto para los comicios andaluces de diciembre de 2018. Así, sería el propio PSOE el mayor damnificado por este error de cálculo, pasando de 45-47 escaños a 33. Un duro golpe que no se supo ver. Además, el descalabre del Partido Popular, donde se marcaba un récord histórico de la formación en Andalucía, no fue tan grave en relación a los datos del CIS. No obstante, el partido obtuvo un mal resultado en relación a los comicios anteriores. Ciudadanos fue el único partido que encajó dentro de la estimación del CIS y Adelante Andalucía quedo por debajo de lo previsto.
Sin embargo, todo esto pasa a un segundo plano cuando se trata el ascenso de Vox. Aquí el error fue mayúsculo y no se apreció con suficiente acierto la subida que iba a tener el partido dentro del parlamento andaluz: De apenas un escaño a 12 finales.
¿Y ahora qué?
A falta de dos meses para las elecciones, la estimación de voto del CIS otorga de nuevo la victoria al PSOE. Da poco más que un triple empate entre PP, Ciudadanos y Podemos; y Vox aparece en un quinto lugar, que de enero a febrero pierde fuerza. Podría decirse que la situación es idéntica a la de Andalucía, pero ¿está vez acierta?
Las elecciones generales van a poner a prueba la “cocina del CIS” de Tezanos, pero, sobre todo, esto tiene un efecto sobre el votante. Fallar en la predicción, por ejemplo, otorgando a un partido una ventaja que no tiene, puede producir un efecto negativo en las urnas. De igual modo, subestimar a un partido que emerge con fuerza, puede hacer que sus votantes se movilicen, y luego, de apenas un escaño nos encontramos con doce.
Este artículo fue publicado en IEVENN
