Más allá de la tragedia social que estamos viviendo, la crisis del coronavirus plantea una de las preguntas que más preocupan a los españoles ¿qué pasará mañana? Cuando todo esto acabe ¿qué va a quedar? Los economistas nos remiten a tres escenarios posibles: la curva en V, en U o en L. ¿Qué significa cada una de estas letras? La V, que es las más esperada, significa que justo tras un pico de crisis momentáneo volvemos al punto donde estábamos e, incluso, puede que hasta se produzca una situación de expansión económica que nos lleve a una etapa mejor.
La U es prácticamente igual que la V, no obstante, nos introduce a unos años duros, no sería una crisis muy larga, pero si que nos costaría salir de ella. Finalmente, la L que es el peor escenario posible.
En este caso, nos adentramos en una recesión económica donde tardamos años en salir del pozo, básicamente, lo que ocurrió en el año 2008. Estas son las tres opciones económicas que se plantean, pero ¿qué opciones reales tenemos de lograr una curva en V?
¿Es posible que en la economía española se produzca una curva en V?
La respuesta es No. Verán, el problema que tiene España, mejor dicho, el problema que va a tener España a la hora de superar esta crisis es que ya arrastra varias situaciones que nos hacen pensar a todos que esto no va a ser posible.
En primer lugar, ya veníamos de perder gran parte de nuestro peso económico internacional, así el diario ABC publicaba “La inversión productiva extranjera (descontadas las Entidades de Tenencia de Valores Extranjeros) se desplomó un 63% entre enero y junio hasta los 10.301,8 millones de euros, 17.600 millones menos y su peor dato desde 2016, precisamente el anterior año en el que el Ejecutivo, en ese caso del PP, estuvo en funciones casi todo el ejercicio. Entonces alcanzó los 9.371 millones, según los datos publicados por la Secretaría de Estado de Comercio”.
En segundo lugar, la situación del empleo era ya deficiente a principios de años. Tras la publicación de la EPA (Encuesta de Población Activa), podíamos leer titulares como: “España sufre el peor enero para el empleo desde que finalizó la crisis” 20 Minutos; “La Seguridad Social pierde 244.000 afiliados, el peor enero desde el 2013” La Vanguardia; España pierde 244.000 ocupados en su peor enero en 7 años, El Periódico; “Enero destruye 244.000 empleos y registra el peor dato de afiliación desde 2013” El País.
Por aquel entonces, el Gobierno ya miraba hacia otro lado “El paro registrado se reduce en enero en 31.903 personas respecto al mismo mes del año anterior” publicaban desde la Moncloa .
Así, la EPA arrojó los siguientes datos: el paro en enero de 2020 aumenta en 90.248 personas . La afiliación cae en 244.000, el peor dato desde la recuperación. Con estos datos, uno se puede llegar a plantear si la curva en V es volver al mismo punto antes de una crisis ¿de verdad queremos volver a este punto?
Malos tiempos para ser optimista
Todos los expertos están de acuerdo en una cosa, el Gobierno llegó muy tarde a aplicar las medidas. El coste en vidas ya es incalculable y el económico todavía no se sabe hasta dónde va a llegar.
El problema vuelve a ser el de siempre, no importa que sean de izquierdas o de derechas, la cuestión es que no están preparados para asumir el mando. El 30 de enero, no el 20 de marzo o el 1 de abril, la Organización Mundial de la Salud decretó el estado de alerta global por el coronavirus. Este mismo aviso se sucedió el 24 de febrero y el 28 de febrero, pero en está ocasión ya advertía a España que se preparase para la pandemia. El 2 de marzo fue la Unión Europa quien lo advirtió.
Pues bien, el 8 de marzo el Gobierno no anuló la manifestación feminista como sería lo lógico y salió a la calle tras todas estas advertencias, al mismo tiempo que la Comunidad de Madrid tuvo que decretar el cierre de colegios y otros espacios 24 horas después. La falta es tan grave que muchos dirigentes ya han sido puestos ante la justicia como el delegado del Gobierno en Madrid.
Tanta es la improvisación de este Gobierno que “El sindicato CSIF denuncia a Illa en el Supremo por «imprevisión«. Así está el nivel.
Obviamente, muchos estaréis pensando es que también hubo un mitin de Vox, partidos de fútbol etc. Vamos a ver, cuando se aplica y se prohíbe los eventos, se prohíben todos. Otra cosa es que Vox hizo un acto político como el Gobierno PSOE-Unidas Podemos, lo que los deja a la misma altura.
Por lo tanto, si sumamos todo esto, salvo que ocurra un milagro y los políticos; sin importar el color y la ideología se pongan a trabajar, no habrá curva en V ni en U